Sebina

Ellinar oriunda de Ellidon, tierras al noroeste de Elligrim.

Poderosa y solitaria, es la orgullosa descendiente de El-Sebín, mítica heroína de la batalla del Dorón y artífice de la victoria frente a los invasores sordrom.

Posee un físico imponente, ya en la raza ellinar las hembras son más grandes y fuertes, pero Sebina destaca por su envergadura. Mide aproximadamente dos metros de altura y sus hombros y brazos son desproporcionadamente gruesos y musculosos con respecto al estándar humano, lo que le hace aparentar tener pequeña la cabeza. Aparte de esto, la hechura de su cuerpo es similar a la humana, con los atributos propios de una mujer. Sus manos y pies son exactamente iguales a los humanos. El tono de su piel tiene un tono que oscila entre el verde y el morado, según el estado de elli a su alrededor.

Su rostro, bello para los cánones ellinar, se asemeja al de una mujer, aunque carece de nariz. En lugar de orejas a los lados de la cabeza tiene unas protuberancias que se asemejan a dos asas, rasgo propio solo de las hembras ellinar. En medio de la cara destacan sus ojos grandes y serenos, de un refulgente violeta, coronados por abundantes y gruesas pestañas. Su cuello es fuerte, y está completamente recubierto del pelaje característico de las razas de Elligrim, que para nuestro entender humano se asemeja a espinas cónicas de goma azul. En las ellinar este pelaje no asciende por la parte posterior de la cabeza, como en los machos, por lo que tienen la cabeza lisa y perfectamente esférica.

Sebina vive sola en su vivienda al noreste de Ellidon, con sus animales y sus recuerdos. Gran conocedora de la geografía de Elligrim y, sobre todo, de los secretos de elli, que domina con una habilidad semejante a la de los mastelli. Su habilidad con el elligron es portentosa. Su madre, una gran ellinar discreta e inteligente, le enseñó a lo largo de su infancia y juventud los secretos de la curación, el arte de la ellida-bram, la combinación de elli y plantas medicinales. Tuvo una relación de gran cariño y amistad con ella. Su muerte hace ya mucho tiempo ha sido, con diferencia, el más duro golpe de su vida. Este hecho marcó un giro en su existencia y la llevó paulatinamente a aislarse de las aglomeraciones y volverse más retraída.

Hay que tener en cuenta que la raza ellinar es fundamentalmente matriarcal, la figura paterna es prácticamente inexistente. Las relaciones sexuales entre ellinar son frecuentes y variadas. En muy raras ocasiones existen uniones permanentes entre ambos sexos, y las líneas sucesorias se producen exclusivamente por parte materna. Esta herencia se puede apreciar claramente desde su antepasada El-Sebín. Sebina nunca supo quien había sido su padre. Este dato es irrelevante para un ellinar.

A pesar de su retiro, tiene grandes dotes de mando. Su serenidad y sabiduría, unida a la experiencia y conocimientos transmitidos por su madre, la han convertido en referente en su tierra, Ellidon, donde es gran amiga de Urgund, su regente, el cual solicita habitualmente su consejo.

(Otros ellinar, Urgund, Groner)